Mi hijo (quien actualmente tiene cuatro años) se probó unos guantes de nieve que teníamos guardados en casa, esta tarde - de esos acolchados, con abundante relleno, y que parecen más bien manoplas porque sólo separan el pulgar de los cuatro dedos restantes. Le pregunté para qué se los ponía y me respondió que para jugar. Se fue a jugar con ellos puestos, y volvió en menos de dos minutos diciendo:
"Mommy, I feel trapped in these" (mamá, me siento atrapado con esto puesto)
Así que recordé cuántos bebés viven sus primeros días de vida atrapados en unas manoplas, sin poder sentir la piel de mamá con las manos, sin poder siquiera explorar los límites de su propio cuerpo con sus manos.
A mí me regalaron varios juegos de manoplas de algodón mientras esperaba a mi hijo, con las típicas razones:
- Los bebés nacen con las uñas muy afiladas porque son delgadas.
- Es muy difícil cortarle las uñas a un recién nacido.
- Si se las cortamos hay un riesgo de infección.
- Si no se las cortamos, se rasguñan la cara.
"Imagina que pasas todo el día con guantes, ¿cómo te sentirías?"
"Bueno, soy odontólogo, cuando trabajamos con pacientes es normal estar todo el día con guantes." respondí.
"Ya, pero si no lo fueras, ¿no te frustraría no poder usar tus manos, tu sentido del tacto al relacionarte con el mundo?"
"Entiendo. ¿Cómo no se me pasó esto por la cabeza?" contesté.
"Pues justamente los bebés que van con manoplas se frustran con mayor facilidad."
"Entonces se las quitamos, pero ¿y los rasguños? ¿y si se araña toda la carita, pobre?" respondí.
"Es que esos arañazos son tan finos que no dejan ninguna marca, es algo totalmente normal. El bebé necesita conocerse, saber dónde está su cara, explorar con sus gestos."
En lo que recordé que tenía una lima de uñas suave, vieja, gastada, que metí en mi maleta del hospital, por recomendación de la matrona que nos dio el curso de preparación al parto. Nos comentó que no era recomendable cortarle las uñas a los recién nacidos, que era complicado hacerlo, que nacían con las uñas largas por lo general, y que si las encontrábamos filosas, podíamos limarlas suavemente para redondear las aristas, con una lima gastada de grano muy fino.
Si tienes amigas embarazadas, por favor no dudes en compartir con ellas este artículo, seguro les será de mucha ayuda. ¡Gracias!
Cuéntame... ¿Le pusiste manoplas a tu bebé? ¿Por qué o por qué no?
Imagen portada: © BlogDesign.es
No se las puse, porque me encantaba tener sus manos entre las mias y ver como me cogía los dedos con tanta fuerza... Es verdad que se arañó alguna vez la cara, pero al dia siguiente desaparecían como por arte de magia. Tampoco lo puse gorrito y no se ha cogido ni un resfriado :)
ResponderEliminarPues yo si le puse al mio, pero en realidad le gustaba mucho estar envuelto como tamalito porque hacia frio asi que no creo que le haya afectado en mucho. Y al mes dejo de usarlos.
ResponderEliminarLe pusimos manoplas cuando volvimos a la habitación pero como no tenían ajuste en la muñeca se le salían continuamente así que decistimos al poco tiempo. Además no me gustaba la idea de tenerlo todo cubrierto. Me gustaba poder agarrarle sus manitas.
ResponderEliminarBesos!!!
Me ha parecido una entrada muy interesante. Ahora me siento tonta por no haber pensado en eso... Con lo importante que es el sentido del tacto e ir reconociendo tu entorno a través de tus manos. Y yo que además no me gusta mucho llevar guantes!!, no me apaño a hacer nada con ellos.
ResponderEliminarYo sí le puse manoplas a mi pequeña cuando nació, supongo que porque es lo que te suelen decir y es verdad que se arañan mucho los primeros días.
Eso sí, cuando llegamos a casa, no recuerdo habérselas puesto más. Le limaba las uñas despacito y como casi siempre la tenía encima, yo estaba al cuidado de que no se hiciese daño.
Pero lo que te dijo la matrona me parece muy cierto y coherente. Lo tendré en cuenta a partir de ahora! Por si vuelvo a ser mamá y para futuras mamás.
Un abrazo!
Pues... yo les corté las uñas desde recién nacidos a cada uno de mis hijos, una vez sí lastimé un dedito, pero no pasó de eso :(
ResponderEliminarSiempre me esperé a que se durmieran para hacerlo, siempre lo he hecho con cortauñas, nunca he usado tijeras.
Ya con Mija como es más grande jugábamos ala estética y siempre me funcionó muy bien :D
Yo no le puse manoplas a mi hija por consejo de mis comadronas.
ResponderEliminarCuando les pregunté me dijeron esto del sentido del tacto en las manos que es tan importante. La verdad, la niña no se hizo ningún arañazo hasta el mes de vida o un poco más, no recuerdo. Antes, las uñas son tan blanditas que se "cortan" solas, se medio desprende la parte que sobresale del dedo y sólo con tirar un poco se acababan de romper. Luego después del primer arañazo, mientras mamaba o dormía le cortamos las uñas con unas tijeritas de esas curvas sin problema. Ahora tiene dos meses y sólo se las hemos cortado un par de veces o tres.
Que gusto encontrar un articulo sobre esto, mi bb no uso manoplas o mitones como les llaman aqui, y realmente fue por instinto yo decia que se me hacia incomodo para el tener siempre sus manitas tapadas pero es cierto el sentido del tacto es maravilloso como negarselos. Claro recibi incontables criticas por los rasguños que eran minimos.
ResponderEliminarA mí la matrona del hospital también me dijo que no se las cortase, que se las limase con un alima de cristal y fue lo que hice, y ahora que ya se las corto después siempre las limo porque parecen cuchillas y no sé cómo pero siempre se araña!!
ResponderEliminarMi enhorabuena por el blog,es maravilloso.
ResponderEliminarUn saludo.
manoplas?? no sabia ni que existian, ni se me hubiera ocurrido...tengo dos hijos..y sí ambos se hicieron alguna marquita en la cara pero procuraba que no se lastimen...qué hermosas sus manitos tan pequeñas!! ni loca me pierdo esas caricias ni ellos el contacto con la piel!!
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