A pesar de las evidencias científicas respecto al daño que causa el llanto infantil prolongado, no consolado, aún continuamos oyendo consejos desafortunados e irrespetuosos con los más pequeños, tales como:
"Pero déjalo llorar que eso es bueno para expandir los pulmones."
Todos sabemos que cuando un enfermo padece enfermedades respiratorias, jamás se le indica como tratamiento el dejarlo llorar desconsoladamente hasta el agotamiento físico, emocional y químico. Esto, sin hablar de la falta de empatía...
"Déjalo que llore, ¿no ves que te está manipulando?"
Sería interesante tomar en cuenta que los niños manipulan a los adultos a su alrededor para que el adulto manipule el mundo, porque el niño sencillamente no es autónomo y aún no tiene capacidad para hacerlo por sí mismo. El Dr. Carlos González habla de este tema en el siguiente artículo titulado "Cómo y por qué los niños nos manipulan".
"Pero si no le pasa nada, déjalo que llore y ya se le pasará."
Con una frase tan simple estamos restando importancia a lo que pueda estar sintiendo el niño en ese momento. Si llora es por algo, sea algo externo que le haya molestado, algo físico como hambre, sueño, cansancio, una frustración como por ejemplo no poder alcanzar algo que anhela, etc. Hablé más del tema en este artículo, en donde explico por qué me disgusta la frase "pero no llores" que tan frecuentemente escapa de nuestros labios como padres y en éste en donde hablo de las palabras odiosas también.
"Es normal, él llora un rato en la cuna y luego se duerme, déjalo; ya le revisé el pañal, ha comido, no tiene hambre ni frío, eso es sueño, no le pasa nada."
Creo que sería más fluído simplemente comprender -y es lo más probable- que el pequeño desea estar en brazos, cerquita de mamá y en su compañía. La necesidad de contacto es tan legítima como la del alimento o el aire. Somos mamíferos y como tales, es natural estar en manada, es lo que necesitamos; la cercanía de otro cuerpo. Así ha sido desde el comienzo de nuestra especie, y sólo han sobrevivido aquellos bebés que con su llanto expresaban su necesidad de compañía y ésta era satisfecha -sino habría muerto devorado por una fiera. Y no, los bebés de hoy en día no conocen las fieras, pero tampoco saben que están a salvo en casita, en su cuna de roble. Saben lo que traen consigo genéticamente; la necesidad de cercanía y contacto con mamá (o un cuidador principal en su defecto).
"Eso es una rabieta, déjalo llorar un rato, ignóralo y ya se le pasará."
Tal vez aún no lo sepamos, pero las rabietas son expresiones de los niños también, generalmente las hacen para marcar que su opinión pueda diferir de la nuestra, comenzar a marcar que es una persona diferente de mamá, por agotamiento, cansancio o no saber aún tolerar y canalizar la frustración. ¿Y qué ganamos nosotros con ignorarlo? ¿Es empático, amable, respetuoso? ¿Lo haríamos con un amigo adulto? Yo creo que no, creo que intentaríamos calmarlo, contenerlo emocionalmente y luego buscar juntos soluciones. ¿Por qué con los niños nos cuesta tanto? Hablo más sobre el manejo respetuoso de rabietas y berrinches en mi libro Reflexiones sobre Crianza Respetuosa, puedes comprarlo aquí o aquí. También exploro el tema en este artículo.
¿Y tú? ¿Qué frases odiosas has oído decir o dicho acerca del llanto infantil?
Si tu peque está viviendo esta etapa y te han gustado estos consejos, creo que te va a encantar mi clase online gratuita sobre este mismo tema. Echa un vistazo aquí y mírala hoy mismo =)
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